Quizá haya sido la combinación de un poco de nieve, con un toque de otoño y un mucho de sol lo que ha ayudado a que hoy me sienta de lo más optimista… o quizá sea la posibilidad de ir a ver a Luke Winslow-King en concierto y poder cantar mi canción favorita de su último disco mientras su guitarra y la del maestro Roberto Luti nos deleitan con lo que alguna revista ha dado en llamar el «sonido del corazón roto».
No more crying today… I’m playing for change!!
Tarareando... 
A lo mejor son cosas mías, pero me recuerda un poco a Mark Knopfler … Saludos.
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¿En serio? ¿Mark Knopfler?… eso es lo que he pensado, muy extrañada, cuando he leído tu comentario y no supe cómo habías llegado hasta ahí, pero luego he vuelto a escuchar la canción, ya «sugestionada» y sí, ese tono bajo y esas guitarras en algún momento podrían llevarnos hacia Mark…
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Como te decía, tal vez sean sólo cosas mías …
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